viernes, 19 de noviembre de 2010

Cristianos y musulmanes en diálogo en Belén


Se sigue reflexionando sobre el Sínodo para Medio Oriente en Tierra Santa y no sólo entre cristianos.
En Belén, en el Centro de Estudios Religiosos Al Liqua, el sacerdote Rafia Khoury, palestino, que ha participado en el Sínodo en calidad de experto, tuvo un encuentro dirigido también a los musulmanes.
Habló de la presencia cristiana en la sociedad palestina, animando el esfuerzo de los cristianos en la vida pública, y de las necesidades – apoyada por el Sínodo – de una mayor fe y un mayor testimonio por parte de la minoría cristiana.
También subrayó cómo, sobre todo en los últimos 30 años, los movimientos islámicos fundamentalistas y el integrismo religioso han dañado la atmósfera general en la sociedad.
Por suerte existen también signos diferentes y positivos, gracias a las realidades y encuentros como este.
“Agradezco al centro Al Liqua por estos encuentros porque unen más a musulmanes y cristianos. De este modo, aumenta la confianza entre nosotros que tenemos y adoramos a un único Dios. Es necesario dialogar, escucharnos más porque nuestra fe nos enseña a hacer el bien y no el mal. Nuestras relaciones deben ser así, de fraternidad y amistad, de visitas recíprocas”.
“Lo que está sucediendo en Irak es algo gravísimo que golpea a los musulmanes y a los cristianos y va contra la humanidad. No es posible que una persona sea asesinada de esa manera tan bárbara. Nosotros como musulmanes lo condenamos duramente. Cristianos y musulmanes deben trabajar para estar unidos y además los cristianos deben permanecer aquí en la tierra de sus raíces, incluso porque los cristianos están aquí antes que nosotros musulmanes. Lo que el Sínodo para Medio Oriente ha hecho y ha dicho tiene todo mi respeto”.

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